Estuve completando un formulario para un concurso, la mejor parte de este tipo de postulaciones es que te hacen indagar y llegar a lugares recónditos de tu memoria y tu existencia, estas postulaciones te hacen hacerte esas preguntas incomodas que quizás no quieres escuchar ni de tu mejor amigo ¡estoy exagerando!
Una de las preguntas era ¿Cuáles han sido los hitos más importantes de tu trayectoria?, entre las opciones estaba: reconocimientos, exposiciones, notas de prensa, otros; a pesar de que llevo tantos años creando, sólo me alcanzo para llegar al primer ítem solicitado y aquí vienen los 3 hitos, que para mi han sido determinantes en este punto de mi existencia como creadora.
El primero habla sobre aquel día en el que también estaba haciendo una postulación y tuve que ir hacia atrás en el tiempo y retroceder a mis inicios (esta da para una historia por sí sola), sin embargo cabe mencionar que en ese entonces me di cuenta que llevaba 6 años tejiendo y creando productos que salían desde mis manos y mi corazón, cuando cashe que era algo que no podía dejar de hacer me dije a mi misma, esto es, esto es lo que quiero hacer, a esto quiero dedicar mi vida, es lo que amo y me llena el alma, y ¡boom!
El segundo hito fue cuando postulé para el registro de artesanos de Chile, algunos dirán que eso no tiene importancia porque no engrandece mis obras, en cambio yo digo que venía desde Punta Arenas en donde nunca me involucre realmente con mis pares artesanos, por tanto ser reconocida como tal en la capital era todo un logró, me sentí validada como artesana.
El tercer hito fue el año pasado, el año más difícil y complejo en mi historia y me imagino que en la tuya también, postule con una obra, esta obra debía presentarla en formato digital y a partir de aquello nació lo que hoy conocen como #elojotodosetransforma es un hito porque fue una convocatoria a nivel región metropolitana, y como saben aquí levantas una piedra y hay una persona, por tanto las posibilidades de quedar y ganar un concurso es como ganarse el loto, y así fue, como si me hubiese ganado el loto, aunque no me alcanza ni pa´ la revancha (broma,) fue un hito para mí porque nuevamente me sentí validada por una entidad que no pesa mucho, pero que sin duda me hace validarme y creerme el cuento de que puedo crear cosas maravillosas con mi quehacer.
Y aquí viene la reflexión, como artista creadora no tengo un titulo que me avalé, no estudie diseño de vestuario, ni diseño gráfico ni tampoco soy artista visual, soy una traductora que decidió dedicarse a seguir a su corazón y a su alma, y en esa búsqueda encontré la lana y sus colores, sin saber muy bien en donde terminaría, a este punto aún no lo sé.
La reflexión nació a partir de lo que he hecho hasta ahora, partí haciendo tejidos, luego incorporé telas, reciclaje textil y ahora obras de arte en conjunto con obras visuales que hacen un llamado al autocuidado y al autoconocimiento, sigo en la búsqueda, sigo conociéndome y aprendiendo de lo que amo hacer, tengo muchos productos, si, lo acepto, estoy experimentando (perdón por eso). No tengo un patrón al cuál seguir porque nadie te enseña a ser artista textil, aunque los municipios y los sistemas me quieran encasillar en la categoría de empresaria, emprendedora, artesana o diseñadora creo que lo que hago va más allá de cualquier etiqueta y aunque tenga que subirme al carro de empresaria lo mío va siguiendo al corazón y créanme que voy tras él.
Los que han seguido mi trabajo desde el inicio saben que ha sido sangre, sudor y lágrimas, aunque suene cliché, es así, este camino de 10 años creando ha sido puro aprendizaje, fortaleza y sobre todo pasión, porque muchas veces me he cansado y querido desistir y bajar los brazos, cerrar la puerta y buscar un trabajo “estable”, porque siento que no avanzo, porque siento que lo que hago no llega a las personas, porque no ha habido dinero aún que compense todas las horas de sacrificio, de estudio y de ensayo y error; pero lo cierto es que si llega, el mensaje que quiero transmitir a través de cada cosa que hago, es un mensaje autentico y sincero, más allá de lo que digan las normas de marketing, a quién tenga que llegar, llegará y en el momento perfecto.
La única certeza que tengo hoy es que seguiré creando hasta que no pueda más o la vida me indique que debo dejarlo.
Gracias por haber llegado hasta aquí, gracias por ser testigo de mi evolución creadora, gracias por apoyarme, darme ánimo y enviarme energías lindas cuando las piernas flaquean. Gracias familia, papá, mamá, heman@s, prim@s, amig@s y coleg@s por su apoyo y amor incondicional en mi cordura y en mi locura.
Con Amor
Mely Reley
29.01.21
En la Casita
