La vida a veces te pone cuesta arriba, no sabemos por qué, sólo llega y cuando eso sucede tienes dos caminos, ponerte a llorar, irte a negro, caer en la negatividad hasta tocar fondo (ya he tocado fondo y bien profundo al nivel de llegar al estado depresivo de llorar sin razón aparente y no querer levantarme) como ya he estado ahí, creo haber aprendido la lección y hoy trato de escucharme en lo profundo, sin embargo, escucharse es una parte de la prueba, la otra es hacerse caso, ppff y eso es lo más complejo, porque luchas y peleas contigo mismo para encontrarle un sentido, siempre lo tiene, pero cuesta entenderlo.
El otro camino es dejar que las cosas se acomoden, tomar acción, hacer algo al respecto, hacerte cargo, enfrentarlo, aunque sea difícil, tomar decisiones y hacer cosas distintas para que ocurran situaciones diferentes, cuesta, más que la cresta, pero se puede, cuando tu corazón o tu guata te dicen que vas bien.
Esta vez no alcance a tocar fondo porque hice algo antes de llegar a ese punto, mi intuición me decía que algo no estaba bien, descubrí lo que era y en aquello estoy trabajando, soy otra yo, una nueva versión, con los ojos abiertos para tomar las decisiones adecuadas según lo que dicta mi corazón, lo que me acomoda y lo que me parece correcto.
Esta nueva versión de mi, se dejo aconsejar, abrazar y apoyar por compañeros de trabajo y amigos de la vida, esta versión de mi, comenzó a trabajar en equipo, ahora se deja amar con menos barreras, esta nueva versión sigue brillando con más fuerza que antes, esta nueva versión tiene nuevos sueños, metas y anhelos, esta nueva versión va por más a comerse el mundo de un mordisco porque lo merezco, ¡Soy genial! Y tú que me lees, también lo eres y puedes con TODO.
Me equivoco, tomo malas decisiones, digo cosas que no corresponden, a veces caigo mal, a veces no me entienden, creen que estoy loca, etc. ¿Y qué quieren? Soy un ser humano, aunque a veces no lo parezca, tratando de transitar de la mejor manera posible esta vida con todos sus matices y sobre todo viviéndola a concho, porque no sé cuándo será mi último respiro; quizás trabajo mucho, pero amo tanto lo que hago que el esfuerzo y el cansancio es parte del precio que hay que pagar por el largo camino que he recorrido para llegar hasta donde estoy hoy.
A partir de hoy, espero no seguir prefiriendo los caminos difíciles y sinuosos, porque para esos soy experta, sino más bien los que fluyan con el todo.
Para llegar a esta reflexión hoy, hice un recorrido por todas las pruebas que he quemado desde que decidí darle un cambio drástico a mi vida y llegue a Santiago, largos casi 9 años que me han permitido encontrarme conmigo, con mi escencia, con la parte de mi que no se amaba nada, que odiaba su cuerpo, que tenia trauma porque le hicieron bullying, con la que creía que la había dejado el tren, con la que no se creía el cuento de lo que era capaz de hacer y crear, con la que no sabía que podía ser Artesana, diseñadora, emprendedora y artista al mismo tiempo, todas esas soy yo.
¿Y tú? ¿Amas a todas tus versiones?
Mely Reley
23.04.22
En la Casita - Santiago de Chile
